Los repartidores de costes son unos aparatos de pequeño tamaño que se instalan en los radiadores. Su objetivo es medir la emisión de energía de cada radiador, para lograr así individualizar el consumo energético en instalaciones de calefacción central. De ese modo se puede obtener de cada una de las viviendas las cifras de consumo energético.
Los repartidores de coste se instalan en edificios con calefacción central en los que, por la estructura de su sistema de calefacción, no es técnicamente viable instalar contadores de energía.