Apostamos por mayor
uso de energías
renovables
Somos proveedores de servicios integrales basados en la eficiencia energética y en las energías renovables. Gracias a la tecnología, la innovación, la gestión y la financiación contribuimos al desarrollo sostenible de nuestros clientes.
Los utilizamos todos los días, algunos incluso varias veces. De hecho, los electrodomésticos suponen prácticamente la mitad del gasto energético en el hogar. Pero ¿qué podemos hacer para ahorrar energía eléctrica en el uso de nuestros electrodomésticos? Te damos algunos consejos sobre el consumo energético de los electrodomésticos:
- Lavadora. Es un electrodoméstico que consume mucha energía, sobre todo cuando tiene que calentar el agua. Puedes ahorrar energía utilizando programas de lavado en frío y utilizándola solo cuando esté del todo llena.
- Secadora. Lo recomendable es que su uso sea excepcional y primar siempre el uso del calor del sol y del viento para secar la ropa.
- Lavaplatos. Este electrodoméstico consume mucha energía, sobre todo para calentar el agua. Es aconsejable utilizarlo siempre cuando esté lleno, o utilizar programas de ahorro o media carga cuando no sea así.
- Frigorífico. Se trata del electrodoméstico que más electricidad consume en el hogar por lo que es aconsejable intentar optimizar su uso. Cuando abrimos la puerta del frigorífico, su temperatura baja y el motor se pone de nuevo en marcha para volver a enfriar. Por eso lo recomendable es intentar optimizar su uso abriendo lo menos posible y no dejar nunca la puerta abierta por un periodo largo de tiempo. Otros consejos son colocarlo lejos del horno y utilizarlo para descongelar los alimentos antes de hacer uso de otros electrodomésticos como el horno o el microondas.
- Congelador. La temperatura ideal es de -15ºC. Como ocurre con el frigorífico, siempre que se abre la puerta pierde temperatura, por lo que es necesario hacer un buen uso. Algunos consejos para ahorrar energía es no congelar todos los alimentos a la vez y mantenerlo lleno sin forzar su capacidad, debido a que los alimentos congelados son una fuente de frío que ayudan al congelador a mantener su temperatura y, por tanto, utilizar menos electricidad.
- Horno. Consume mucha energía por lo que se recomienda su uso solo para cocinar y no para descongelar o mantener el calor de los alimentos. Cuando esté en funcionamiento, es necesario evitar la puerta abierta debido a que perderá temperatura y el motor se volverá a poner en marcha, con el consiguiente gasto energético.